INGREDIENTES

Navajas; 1 paquete lleva unas 22 navajas
Aceite de oliva virgen
Sal

Para hacer la salsa
1 diente de ajo
Perejil
Sal
Aceite

PREPARACIÓN Y COCCIÓN

Antes de cocinar las navajas, las cubrimos totalmente con agua mineral y un buen puñado de sal. Si es agua de mar, mucho mejor. Es importante que las dejemos derechas para que suelten la arena que puedan tener. Las guardamos en la nevera. Al cabo de dos horas, sacamos las navajas de la nevera y les damos la vuelta: la parte que estaba arriba, la ponemos debajo. Si hay arena, cambiamos el agua.

Cuando las queramos hacer, las sacamos de la nevera, las enjuagamos, las escurrimos y ya las podemos cocinar.

Calentamos el horno a 190 °C. Ponemos las navajas en una bandeja de horno, aliñamos con una pizca de sal y un hilo de aceite. Las entramos al horno y las dejamos hasta que estén muy abiertas; unos 4 o 5 minutos. Si las dejamos demasiado tiempo, quedan secas y nada buenas.

En un mortero hacemos una picada con ajo, perejil y una pizca de sal. Cuando lo tengamos muy picado, añadimos un buen chorro de aceite y removemos. Servimos las navajas aliñadas con esta salsa. Servimos en un bol aparte el resto de la salsa.

PARA SABER MÁS

Hemos cocinado las navajas en horno combinado, a 190 °C, 60% de humedad, 5 minutos. Si no disponemos de horno combinado, podemos poner un recipiente con agua dentro del horno.
El tiempo de cocción es importante. Cuando las navajas están muy abiertas, las retiramos.
Las navajas, si son frescas, se conservan, vivas, unos tres días en la nevera. Si las tenemos con agua de mar, mucho mejor. También podemos preparar agua mineral con un buen puñado de sal en una proporción de 30 g de sal por litro.

RESULTADO

Como aperitivo, entrando o acompañando un pescado a la plancha. ¡Son buenísimas!

Montse