INGREDIENTES PARA 5-6 PERSONAS
1 pollo de corral de unos 3 kg
1 cabeza de ajos
6 cebollas del tamaño de un huevo
1 zanahoria
1 rama de tomillo
1 hoja de laurel
100 ml de aceite de oliva virgen extra
100 ml de vino rancio o de brandy
Sal
Pimienta negra molida
½ rama de canela
PREPARACIÓN Y COCCIÓN
Pedimos el pollo en 12 trozos y que nos separen las alas de las pechugas.
Lavamos el pollo, lo dejamos bien pulido y lo salpimentamos.
Encendemos el horno a 200 ºC, calor de bóveda y solera, rejilla a la altura 2.
Preparamos la olla de hierro, ponemos los trozos de pollo bien repartidos, añadimos el aceite y el resto de ingredientes, excepto el vino rancio.
Tapamos la olla y la entramos al horno sobre de la rejilla, lo dejamos unos 45 minutos.
Pasado este tiempo, abrimos el horno, destapamos la olla y añadimos el vino rancio.
El pollo habrá soltado su jugo.
Le damos la vuelta para que los trozos de pollo que han quedado encima pasen a la parte de abajo de la cazuela, mientras tanto el vino se evaporará.
Tapamos la cazuela y cerramos la puerta del horno, dejamos cocer 45 minutos más.
Abrimos el horno, destapamos la cazuela y pinchamos el pollo, deberá estar blando y cocinado en su propio jugo.
Con la cazuela destapada dentro del horno, encendemos el gratinador y doramos el pollo a nuestro gusto.
Damos unas vueltas al pollo para que nos queden todos los trozos dorados, unos 10 minutos.
Sacamos la cazuela del horno y la tapamos.
Dejamos reposar un rato y servimos.
PARA SABER MÁS
Una manera fácil y muy efectiva de asar el pollo. Queda muy meloso. Si programamos el reloj del horno, podemos controlar el tiempo de cocción con mucha tranquilidad. Dependiendo del peso del pollo, el tiempo de cocción puede variar ligeramente. Es importante conocer el horno. Esta receta está pensada para un pollo de corral bien criado, grande y de carne consistente. Los pollos pequeños de granja no aguantan estas cocciones y se deshacen.
RESULTADO FINAL
Un asado clásico buenísimo hecho de manera diferente, más fácil y con un resultado espectacular. Y sin ensuciar el horno. ¡Qué aproveche!
Júlia y Montse